jueves, junio 29, 2006

Inventario

Qué raro se me ha hecho estar una semana entera sin escribir... Pero necesitaba desconectar un poco de todo y hacer los mínimos esfuerzos mentales posibles: me he dedicado a ir de compras (poca cosa), cortarme el pelo, y recuperar esas horas junto a mis amigos que tanto echaba de menos.
El lunes por fin terminé los exámenes (ya era hora) y digamos que no acabaron todo lo bien que me hubiera gustado: el último fue un auténtico desastre, me puse nervioso y no me cuadraban las cuentas del Balance por ningún lado... Pero bueno, el mal trago ya pasó y ahora me voy a tomar unas cuantas semanitas sin tocar ni una sola hoja de apuntes.
Llevo ya unos días oficialmente de vacaciones, pero como aún no he parado quieto ni un momento, pues como que no me he hecho a la idea todavía.
Mañana me marcho al apartamento nuevo de Jávea (un pueblecito de Alicante, desde donde salió David Meca nadando como una loca rumbo a Ibiza) con mi padre y su mujer. Espero que los dos se porten bien, porque hace siglos que no me voy tanto tiempo con ellos, y no sé si resultarán muy cargantes...
Estaré allí sólo cuatro días: lo suficiente para ponerme algo moreno, pensar en ideas para los post veraniegos, hacer fotos y airearme un poco, que falta me hace, porque me estoy empezando a agobiar en Zaragoza.
Desde Jávea me iré un par de días a Madrid, donde ya tengo una tarde reservada para unas cañitas con mi amiga Nat, y después ya volveré a Zaragoza a amortizar los bañadores nuevos en la piscina.
Dentro de dos o tres semanas tengo pensado ir de nuevo al apartamento de la playa, pero ya con Manuel y algún amiguete que se apunte, y también nos marcharemos algún fin de semana al apartamento de Jaca, a disfrutar un poco de la montaña, que también me apetece bastante. Así que este verano promete ser bastante movidito y completo...
Y bueno, poco más, ahora me toca planear qué voy a meter en la maleta, así que voy a empezar a enumerar todo aquello que se me ocurra, en plan inventario:
_ Tres pantalones piratas vaqueros (son distintos: uno es más largo, otro más oscuro...)
_ Pantalón pirata rojo
_ Pantalón largo blanco
_ Pantalón tailandés negro
_ Pantalón vaquero largo de vestir
_ Polo rosa, polo azul, polo negro
_ Camisetas de manga corta: verde, amarilla, azul
_ Camiseta de manga larga de rallas
_ Camisetas sin mangas: roja, negra
_ Dos camisas blancas
_ Camisa negra
_ Camisa azul celeste
_ Jersey fino negro, por si hace un poco de fresco
_ Dos cazadoras de primavera: una roja, y una cruda
_ Ropa interior: de todas formas y colores
_ Calcetines tobilleros: negros, blancos, verdes, amarillos, y de cuadros
_ Cuatro bañadores: dos nuevos de flores enormes, otro cortito de Brasil, y otro ajustadito de Adidas.
_ Toalla de piscina
_ Cinturón blanco, cinturón amarillo, cinturón rosa y cinturón negro: no, no son de Judo jajaja
_ Zapatos negros, y zapatos blancos (y abrillantador)
_ Zapatillas rojas, por si quiero ir casual
_ Sandalias blancas, y azules (me tengo que comprar hoy unas negras)
_ Neceser: no pienso enumerar todo lo que llevo dentro. Sólo diré que hay más de quince items (entre gomina, ceras, colonia, pinzas, maquinillas, cremas...)
_ Gafas de sol
_ Pulseras
_ Documentación: incluída la "L" y el carnet de conducir, porque yo hago parte del viaje
_ Un libro: probablemente vuelva tal y como lo llevé
_ Música: a ver si preparo algo para el coche, porque si no las cinco horas pueden hacerse eternas.

Creo que no me dejo nada... pero como siempre me olvido algo superimportante y me llevo cientos de cosas inútiles, pues si os dáis cuenta, me lo decís en un comment y me hacéis un favor jajaja
Un besote a todos, os veo la semana que viene! :-)

jueves, junio 22, 2006

Números

Aunque siempre se me han dado mejor las letras, hoy he encontrado la calculadora en el fondo de un cajón y me he puesto a pensar en nuestros números:
Llevo un tercio de mi vida a tu lado. Durante estos años, un 10% del tiempo me hiciste sentir el chico más afortunado del mundo, un 30% fuimos medianamente felices, y el resto (un 60%, si no me traiciona esta vieja Casio) hemos sido unos completos desconocidos que dormían en la misma cama y compartían la pasta de dientes.
En todo este tiempo, únicamente acudimos a 17 fiestas, me acompañaste a 5 escasos viajes, olvidaste nuestro aniversario 4 veces, y se te fue la mano otras 2.
El resto de la gente siempre me consideró un 9, mientras yo no me creía más que un 8, y tú me veías como un vulgar 6. Y ya sabes que los simples aprobados nunca han sido lo mío...
Además, me cansé de aportar el 75% de mí a esta relación, mientras tú te limitabas a dejarme ver apenas un 25% de lo que realmente eres.
Me imagino que a estas alturas habrás comprendido que este numérico reproche supone un adiós: un taxi nos espera en el portal a Bobby, a mí, y a nuestras 3 Samsonites, y en 47 minutos un tren que sale del andén 6 de la estación nos alejará 854 kilómetros de aquí.
Para contabilizar nuevas sumas, restas, multiplicaciones y divisiones. Para empezar de cero, sin ti.

lunes, junio 19, 2006

Pistacho con chocolate

Ayer, como todas las tardes de verano, viniste a buscarme para comernos un helado en el parque. Tú, de pistacho. Yo, de chocolate y vainilla: ya sabes que soy un clásico, no lo puedo remediar...
Nos sentamos en el único banco que quedaba libre. Cerca nuestro, unos niños construían enormes castillos de arena con la ilusión de quien hace algo grande. Mientras, unas señoras charlaban e intercambiaban recetas, y un grupo de jubilados competía por conseguir el prestigioso título de campeón semanal de petanca.
Entre tanto, tú me contabas algo que no acierto a recordar, y yo fingía escucharte. Y sobre todo te miraba. Estabas más guapo de lo normal: ligeramente despeinado, con la frente húmeda por el calor de agosto y con un polo rosa que te queda un poco holgado. Creo que has adelgazado estos días... No será porque no tomes helados.
Los últimos rayos de la tarde calentaban nuestras nucas, y por un segundo pensé que a tu lado el tiempo se detenía. Y estuve así, cerquita de tí, sin hacer nada. Al poco tiempo, las gotas de mi helado derretido cayendo por el pantalón me sacaron de mi ensimismamiento.
El sol proyectaba nuestras sombras hacia adelante, y las alargaba como si de gigantes se tratase. Me levanté para tirar los restos del cucurucho a una papelera, y por un momento nuestras sombras se tocaron a la altura de sus cabezas. Las dos siluetas se juntaron en un roce fugaz, tangente, proyectando en el suelo un beso a tres metros de nosotros tan sólo un instante.
Y yo pensé en tí, y en tu polo rosa, y en el sudor de tu frente y en mis ganas de besarte. Y tiré al suelo mi helado, me acerqué a tí, y decidí probar el extraño y exquisito sabor del pistacho con chocolate.

jueves, junio 15, 2006

Soy

Soy lo que soy a cada momento.
Un chico de metro setenta que a veces se vuelve diminuto, y otras nadie le hace sombra.
Un niño adulto, o un adulto niño.
Un puñado de buenas ideas en los bolsillos.
Un valiente que tiene miedo.
Una coraza llena de sentimientos.
Una resistente fragilidad.
Una superficialidad que esconde algo más.
Una alegre tristeza.
Una melancolía esperanzada.
Un conjunto de contradicciones que juntas cobran un único sentido.
¿Y tú, como me ves?

lunes, junio 12, 2006

Razones

Amor mío, existen tantas, tantas razones para no volverte a ver...
Porque lo primero que hago cada día es pensar en ti. Porque cuando sonríes se me hace un nudo en la garganta y no consigo decir nada lógico. Porque me grabaste aquel cd sin necesidad de pedírtelo, y porque siempre recuerdas mi bebida favorita. Porque en aquella tormenta me dejaste una chaqueta que huele a ti. Porque he memorizado la constelación de pecas de tus mejillas. Porque a tu lado dejo de ser raro para convertirme en único y especial. Porque en tus ojos veo reflejada la mejor parte de mí.
Porque me da miedo. Y porque tú tienes tu vida, y yo la mía.

jueves, junio 08, 2006

Olvidé decirte

Llevaba varias semanas dándole vueltas, y finalmente decidí que anoche te lo diría. Durante horas ensayé en el espejo: había elegido cuidadosamente las palabras, una a una, midiendo su textura, su ritmo y su musicalidad. También había probado distintas entonaciones, y practicado mis mejores gestos. Quería que todo saliese perfecto: había imaginado tantas veces esa conversación en mi cabeza...
Por fin viniste a buscarme: eran las 9 y media. Durante toda la película me limité a sonreír y a comerme las uñas cuando no me mirabas. Debo confesarte que no me enteré del argumento, así que si me preguntas que qué me ha parecido, te responderé con un simple "no ha estado mal..."
Al salir del cine me armé de valor. Pero justo en el momento en que mis labios comenzaron a hablar, una charanga apareció en mitad de la calle, con sus bongos, sus trompetas y sus timbales. Tras ellos irrumpió un oso panda que, cansado de comer bambú a todas horas, se había escapado del Zoo metropolitano para causar el pánico en el centro de la ciudad. Momentos después, un camión de helados volcó al tratar de esquivar a uno de los trompetistas, empapando a toda la avenida (incluidos el oso panda y nosotros) de sorbete de limón y sirope de fresa.
Y ayer, entre tanta confusión, olvidé decirte que te quiero.

lunes, junio 05, 2006

Probabilidades

La vida es una sucesión continua de sucesos aleatorios y situaciones improbables (y en ocasiones absurdas)
Vivimos condicionados a la pequeña posibilidad de encontrar a nuestra media naranja, de aprobar el próximo examen de Dirección Financiera, de acertar la combinación ganadora del cupón de la Once, o incluso de que una maceta nos caiga en la cabeza.
Hace unos días un martillo voló desde un octavo piso hasta el suelo e impactó en la rodilla de una conocida, a la que todas las mañanas saludo en ese mismo lugar. Un martillo que también podía haberme dado a mí.
El azar juega un importante papel en nuestras vidas, y las situaciones pueden variar enormemente en cuestión de segundos, de milímetros.
Las probabilidades, por pequeñas que sean, siempre están ahí, esperando su oportunidad para sorprendernos.
Así que adelante, poneos un casco de bici, comprad un décimo en el quiosco más cercano y corred a buscar al hombre (o mujer) de vuestra vida...

jueves, junio 01, 2006

Creer

Hay personas que creen en la vida extraterrestre. También hay quien cree en los milagros y en la salvación eterna. Otros creen que el hombre jamás llegó a pisar la Luna. E incluso algunos creen que Elvis sigue vivo, comiendo pollo frito en alguna playa de la Costa Dorada.
Y yo... Yo creo en tí. Con eso me basta.